miércoles, julio 31, 2013

antonio martínez i ferrer








antonio martínez i ferrer

El nervio se escurre sangrando
por los golpes del acero
silba la bayoneta
junto al viento enrojecido

de fiesta la complacencia
perdura en la mirada
de los libros contables
mientras
registra
los apuntes inacabados
de la pobreza

la justicia es un payaso
que se ocupa
en distraer
el amanecer del mercado

dicen
que nacieron iguales
víctima y verdugo
pero legislaron
en los entreactos
de la fiesta del dinero

algún poeta
recita la soledad

restos obreros
mueren solos

nadie reporta
la dignidad de la vida

la huida
sirve a la alimaña
el silencio
 viste al poderoso

nuestro lugar son las trincheras
sembrando unidad
para el combate




martes, julio 30, 2013

Alberto García-Teresa


Pierre Doucin


Alberto García-Teresa
De Abrazando vértebras (Baile del Sol, 2013)


TANTOS CONSTRUYENDO CERROJOS
y tan pocos buscando llaves.

«El capitalismo nos moleculiza»
(Claes Andersson)


LA CLAVE ESTÁ en desintegrar todo:
desmembrar los cuerpos, aislarlos
inoculando la convicción de células
autónomas, sin erosión ni lados.

La clave está en seccionar nuestros músculos,
ennoblecer la soberbia del solitario,
desprestigiar la actividad del hormiguero.

Convencernos de que cada rueda debe horadar su surco
derrochando voluntad, tiempo, esfuerzo,
sin construir un sendero compartido,
resulta el mejor método para fosilizar las columnas
de hielo que sostienen
esta amputación de dedos.

Somos nubes que buscan luz
y no sabemos que conformamos,
                                                      juntas,
                                                                   el cielo.


lunes, julio 29, 2013

GSÚS BONILLA



Pierre Doucin© – Reverse Side


GSÚS BONILLA

OVEJAS ESQUILADAS,
QUE TEMBLABAN DE FRÍO


YO NADA

en mi niñez
no había tanta prisa
tampoco semáforos y sí un juego tonto
que colocaba a cada uno por igual
que te daba paso
según se iluminaban tus ojos.

nos tocó equis y perdimos –todos-
me tenía que ir
así que pude estampar un punto y final.

dulces de heroína
y jeringas de serpiente,
la cocaína era un deporte adinerado,
el mundial del 86 también,
algunos cayeron, otros callaron.

la piedra, el mechero,
tabaco, más juegos;

por mí y por todos mis compañeros.
y allí, mientras besaban la tapia
oían medio locos una voz:
te  estás  matando el  cabrón
-déjate las venas en paz-.

se van perdiendo latidos
mientras se araña la luz.

no llegué a comprender
las trampas asesinas
que acechan en el itinerario
hacia tu hogar…
matan, mutilan,
como un perverso recuerdo
de una guerra pasada.

te juro
que perdí los adjetivos
en este cieno
de llanto y cenizas
que acumula el cenicero.

me desilusiona tanto
nuestro mundo

que mi odio
me rompe
y se cuela por los cientos de agujeritos
de mi casa ametrallada.

mi recuerdo son trincheras
de cuando éramos crios.
luego los dieciocho. y tú

—¿y tú?

yo nada. yo escribo.