lunes, junio 11, 2012

Depredación.



La herida; Jaime Juan Codina


Del libro, Angustia (2002-2003)
Antonio Martínez i Ferrer

…y los temblores relataban
el brillo
del acero asesino.

De nuevo sentí
la soledad.

Otros gritos
otras lágrimas
anidan en otros ojos.

Cansado siento mi aliento
caminando
por las mejillas africanas.

Su atardecer
escribe en el viento
el grito de la indiferencia.

Las agonías largas
gritan en la plaza
versos para el dolor oculto.

Su amanecer relata
hambre, persecución y muerte.



3 comentarios:

derramada dijo...

Cada poema tuyo me hace anima a leer más poesía. Se ha convertido en una constante.
Besos.

ShiroDani dijo...

Qué ánimos casi perdidos renuevas con tu poética. Africanos. Ese país que nada nos importa… pensando un poco, me doy cuenta de que ¿cómo nos iba a importar? …si dejar un futuro vendido, arruinado y esclavo para nuestros hijos aquí, a la mayoría, nos da igual. Felicidades por el poema Antonio. Un abrazo.

Antonio Martínez i Ferrer dijo...

Soñar y vivir en las tricheras revolucionarias de la palabra es contruir nuevos paradigmas para alimemtar un nuevo discurso revolucionario que nos libere de este aburguesado modo de pensamiento en el que estamos instaldos. Abrazo de combate, Antonio.