Lugar destrozado: Paul Klee
Utopistas y Desutópatas
ÁNGEL CALLE
Noviembre
2008, Encinarejo, Córdoba
AGUA PARA LA COSECHA NEGRA
No
había agua para el
fuego inmenso.
Un
hombre levantó una casa
bombardeada
y encontró un cadáver sediento.
Los
ríos y las cañerías huyeron
ante
el desfile de proyectiles borrachos.
Había planes de contingencia
y
refuerzos y repuestos
para
la inagotable sed de las tropas.
Pero
no había agua para las manos moribundas
sólo la justa, apenas unos litros
para
bendecir y calmar los pozos de petróleo ardiendo
para
reclamar el trozo de carne como buenos
mercaderes.
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